El Esqueumorfismo (tambien conocido como Skeuomorphism en inglés) es una estética que se basa en el concepto gráfico de hacer que los elementos virtuales se parezcan a sus equivalentes en el mundo real. El Esqueumorfismo se utiliza principalmente de manera virtual en interfaces de usuario (UI) y diseño web. Sin embargo, el Esqueumorfismo Tradicional, no virtual, puede extenderse a la arquitectura, la cerámica y el diseño de interiores. El Skeuomorfismo contrasta con el Diseño Plano, que es un estilo gráfico más simple y notablemente menos detallado. La palabra Esqueumorfismo viene de las palabras griegas skeuos (que significa «contenedor o herramienta») y morphḗ (que significa «forma»).
Un esqueumorfo (también escrito como skeuomorph o skiamorfo) es un objeto derivado que retiene elementos de diseño ornamental (atributos) de estructuras que eran necesarias en el original. Los esqueumorfos se usan generalmente para hacer que algo nuevo se sienta familiar en un esfuerzo por acelerar la comprensión y adaptación. Emplementan elementos que, si bien eran esenciales al objeto original, no cumplen un propósito pragmático en el nuevo sistema. Una de las ventajas clave del Esqueumorfismo es que puede ayudar a que las interfaces digitales se sientan más naturales e intuitivas. Al imitar objetos y materiales del mundo real, el skeuomorfismo puede ayudar a reducir la carga cognitiva en los usuarios, facilitándoles entender cómo interactuar con un dispositivo digital.
El Esqueumorfismo se suele confundir con la estética de Frutiger Aero porque ambas estéticas se desarrollaron en la misma época (aproximadamente entre 2004 y 2013). El Esqueumorfismo se aplica únicamente a los gráficos que se parecen a la realidad o que utilizan texturas/elementos realistas. Ejemplos de ello serían la estantería virtual de madera de un lector electrónico o una aplicación de calendario que se asemeja a una agenda física.
